jueves, 26 de diciembre de 2013

#5

<<I wanna live, but I don't wanna pay the cost.>>, dice Falconshield en una de sus canciones. Pues eso era lo que ella sentía. Que quizás, sí, quería estar ahí para ver qué ocurría, para mirar cómo crecía tanto su parte física como etérea. Pero por otra parte, no quería sufrir lo que suponía estar viva.

Verdaderamente, no entendía por qué la gente era feliz y ella no. Sí, era cierto, ellos tenían pareja, eran un puzzle completo y ella solo era una pieza inútil que no encajaba con nadie. La típica pieza que no puedes poner en ningún sitio y dejas apartada, para ponerla junto a las últimas.
Es cierto también que ellos tenían amigos, salían de casa y bebían, fumaban, se divertían. Compartían aficiones, historias noveladas y opiniones que se fragmentaban en trozos para volverse a formar junto con otras nuevas, y así, construir su personalidad. Claro que era cierto todo eso.
Pero lo que ella creía y pensaba era que ellos no se preguntaban el por qué...

... El por qué están viviendo, el por qué merece la pena gastar tu vida, la única que tendrás, acatando unas normas que fueron impuestas simplemente para controlar a la población como un rebaño de ovejas. Porque la mayoría de la gente que defiende la anarquía, por poner un ejemplo, no sabe qué conllevaría estar en un estado totalmente anarquizado. Porque se dejan arrastrar por el viento, y sin esfuerzo, van alcanzando y barriendo los obstáculos prehechos, precocinados como una lasaña que compras un sábado porque no tienes ganas de cocinar. Porque todo está pensado para que entremos en el trapo, porque no nos dan otra opción. Porque nos programan desde pequeños para no antender a otra necesidad, porque no sabemos otra cosa.
Sin embargo, nosotros, los que corremos a contracorriente en este Bosque, a los que nadie nos escucha, sabemos ver por encima de lo que nos muestra el mundo, de lo que "podemos ver" según ellos. Le ponemos pegas a todo buscando porqués, pensando en las cosas verdaderamente importantes, porque antes de estudiar una ingeniería estás tú, como persona, viviendo la vida, deseando ser feliz y procurando llegar al final del gran misterio de la vida, en una carrera a contracorriente en un mar de corrientes marinas, intentando ganar a la Muerte.



Canción de Falconshield (Incomplete):

domingo, 22 de diciembre de 2013

#4

Cada día, cada hora, incluso a cada minuto que pasaba, se iba oscureciendo más y más. Le gustaba menos la compañía, o simplemente el ocio. En cambio, descubrió nuevos gustos y aficiones, entre ellos, pararse a pensar y escribir su historia.
Nadie la iba a leer. A nadie nunca le interesó lo que ella pensara, actuara o dijera. Lo que ella dijera o escribiera, lo que expresara, a nadie, nunca. Ya había asumido que todo lo que escribía no lo iban a leer y por eso podía escribir lo que quisiera. 
Y ahora mismo echaba mucho de menos a una persona.
La llevaba echando de menos un mes y dos días, y esa era la principal razón de su tristeza. E intentaba tranquilizarse y pensar que el tiempo lo cura todo, y que quizás dos meses no era nada, pero ese verano para ella fue realmente inolvidable.

Había entregado tanto...
Y había recibido tanto...
Había, por tanto, sido tan feliz...

... Y ahora esa felicidad se había esfumado tan rápido como la llama de una vela al más ligero soplo.
Y no era como cuando se muere algo que quieres, que simplemente te resignas al cabo de un tiempo y aprendes a vivir sin ello, es el "quiero y no puedo" de que está ahí pero sabes que es imposible.